12 mar 2021

A la puta

Sospecho, en resumidas cuentas que uno vale mucho más cuando la factura es más grande, no es más gorda la mayor categoría, debería hablar con el contador público que uno tiene para tomar negroni o aperol, capacitados todos para hacer oscuridades, trascartones los facultados, sino...

Pensaba que el monotributo social era para los pobres y las categorías para darse dique. Lo cuantioso, el caudal de monedas en cascada cascabeleras cataráticas, en los jueguitos, y el pobre para hacerse un par de fichines campaneaba y cuando era oportuno pateaba la máquina. Venía el encargado y…

Más vale la monedita por el metal, tuvimos el centavo, las pentagonales, las del Diego. Un envase, un litro, un peso, pero claro…cincuenta centavos de dólar se compra, y los bidones se dan por menos de cien...

O sea…

Calculá que los chinos son todos la misma mierda, pero nada se compara con el método de enseñanza nipón para las matemáticas. Aprendé a sumar, restar, multiplicar y dividir…

11 mar 2021

Mazzone

Respecto a la metáfora y la metonimia de los tangos poéticos de aquellas líneas malversadas a chorro, el furcio enfatizó la infracción de la figura impresionante; delata el lapsus, es parte de la psicopatología de la vida cotidiana. Freud se aferró a eso para no torcerse sin aflojar, después la forma, sin estructura, no hubo nada. De ahí en adelante, se trastornó. De antemano la nosología del psicoanalista era otra, aparte, no solo no era funcional, pivoteaba, velaba, se escurría, tenía cintura, por eso no movió la estaca de los gitanos, obturando orígenes. Cuerpo de Cristo. Amen. Uno anda por Honduras, para ver como la casa de Carriego derruida se deshace en cultura y los libros se llenan de piojillos filántropos, bibliotecarios muertos, poetas suicidas, por eso uno no da ni las gracias cuando Palermo, el barrio de Borges, no es sino otra cosa que un trago amargo en honor a una cervecería como la de Bieckert. Se sufre mucho por nada, y sin embargo es todo para algunos que dan vueltas a la cosa, sin hablar. El contorno del agujero está basado en un dios que hace trampas en el mus. Salir a comer afuera no solo es un privilegio, sino un arte del fuego. Se nace porque se hace, la vida replica la muerte. Hablando del pucherito rico, la cuenta no se pide, viene cobrarse, la propina no se calcula estimando, se da sin escatiar y los sueños imposibilitados de un barón; por eso hay que saber sobre el robo de una voluntad; la “asintomatología” y el llanto histérico no tiene caso y para peor, no hace caso, que no es gracioso sino violento el cachetazo, pero hay un castigo anticipado para el carácter absolutamente voluptuoso, inviolable la frontera y sinvergüenza. A tirar reyes se ha dicho, que los ladrones desenmascarados digan de donde dar de aquella baraja, son un clan clonado o una gran familia que tiene sus desmembrados explicantes teólogos, porque nicomaquearon el destino, movieron el suelo y la locura se embotelló. Sino el juez irreverente, malparido, martilla, manda. La joya de la mujer es la comida; parte de un fetiche insaciable del dinero que lo guarda bien adentro de la cocina. El afano debe provenir del afán, o del alma fun, de hecho existió un comic , existió: “afanancio”. Rómulo le dio permiso al arribista caminero, no fue algo inglaterraqueo. Nunca supimos quien escribió Robin Hood. Esa colaboración anglosajona nos hace preferir ser más tanos que alemanes. Alquitrán y plumas, marca el valor del castigo por el crimen miserablemente afrancesado. El agua no se mastica y el vidrio no se come, pero los rusos son capaces. Contrabandean caballeros mafiosos, del hampa la trampa, fraudianos. Le dejaremos una verdad concatenada al quitante, sustractivo, restador, chupóptero, infinitamente adjetivado.

6 mar 2021

Breguet

Horas de hacer relojería suiza, para parar las: “manecillas, masillas, mancilladas”, esta gente le da cuerda aristotelicamente a lo macedonio tipo tordo anestesiado, afilador geométrico, nunca queda romo; pide tres colores de yeso, distintos tiempos de fraguado; busca, extraña, deja, vuelve, persigue, se agacha, recuerda chequear su alma con chaquetilla porque la figura más rara no marca la aguja que gira alrededor del círculo odontológico y del colegio de los psicólogos; nucleados allá por San Juan y primera junta, la vida transcurre; esta hora entrerriana es siestera para el cuco, que anduvo pastoreando el conejo cuando tuvo que dar vizcacha; sin embargo hubo un tiempo en el que el precipicio acompasillo; la blanca bien justa descansó una al lado de la otra y el culo del óvalo por esas circunvalaciones contorneadas, anda la negra con puntillo, toca el límite, granuja engranado, un silencio de redonda. Entonces, contemplaron el suicidio truculento. Leopoldo Marechál con tan poca repercusión en el lenguaje. Y a mi me gusta cuando las personas, preciosas, se desentienden por la esbornia humanoide en el biorsi; atienden, y se pelean con locura como seres. El letrista del tango no dice nada, pero por ahí le da en la tónica, dominante, persiste, canta casi una octava. Afinando la voz con la bigornia, que de queda con un poco de caña y un paquete de puchos haciendo pilcha como la nona. La locura sobreseída de una momia tersa aunque rígida, de luto. Mutismo selectivo, cosas de la nona, arremangada y los huevos por la botamanga, sin suspensores. Una vieja desportillada con frío me dijo un día: Dr. ¿No me da un vacito de agua? sentí cosquillas en el alma. Un chiste por una carcajada: Tome y daca, leche de caca. (Lo dijo un psicoanalista judío).