Música febril

Es un string, un hang, un colchón apenas perceptible amodal. Se escucha con un delay, reverberante, algo muy soft, que puede ser cualquier nota, una sola nota, de cualquier escala, para empezar, pero preferentemente tiene que ser un acorde compuesto, bien complejo, abierto, que tenga la fuerza expansiva infinita de un orgasmo que nunca acabe y así y todo, tenga sus tiempos bien marcados.

Entre-vistas

La anamnésis tiene un valor inestimable, sin embargo últimamente se reduce al análisis de las resistencias hic et nunc. Sin escarbarse la nariz, el discurso del analista, la producción del sentido literalmente y la escucha de la palabra plena de significantes que retumban en el hueco cóncavo del espejo vacío hacia lo convexo de la convicción profundamente enraizada, similar en su arraigambre a la certeza psicótica. Sigo un toque, más para vos. Al recién ingresado a la clínica, la parte demandada, se le confecciona una hojita con los datos, que la otra parte accionada aporta acumulando fojas, folios en la educación, todo debe ser debidamente autenticado, puntualmente detallado en el expediente, si se trata de una causa abierta. Entonces, por vos, el enfermo es causa y no consecuencia; sus nombres figuran en autos caratulados. Inmenso. Sigo. Nombres, D.N.I, C.G.E. Matrícula. ANSES, Obra social. Antigüedad. Antecedentes académicos. Títulos obtenidos, etc. Ya no existe más el motivo de consulta como sede del código en donde el tipo se va directo al edén sin piedad a ceder la palabra para que surja algún efecto de la entrevista. Me queda por decir más de lo mismo, lo justo y necesario y más que suficiente. Entonces recarguemos las tintas. Queda sin efecto, se remueve, y la aplicación de la sanción de la sanación son 3 (tres) días hábiles a partir de la notificación. Jurar que en 10 (diez) sesiones el perito va a expedirse y darle el diagnóstico al Juez, repartiendo las copias a la marchanta. Así es que hay que manejarse  en Tribunales. Uno es lo que le parece al otro que no dialoga con el Otro. Encontrar una psiquiatra como uno es una Odisea, un by-pass, un recorrido por la via appia, por eso encontrar en Dharma una dama de espectro visible es una crusificción. Me cantaba a mi mismo "Yo soy como la rata de Skinner", siempre supe de los gatos de Thorndike y que había palomas experimentales, pero no tan conductistas. Escapar de la rueda del hamster es una obligación en estudios a doble ciego, salivar es una respuesta condicionada. Lo digo porque, pienso en base de psicofármacos experimentados en cuestiones relativas o que atañen a efectos adversos, por sobre todo el apartado: Lactancia. ¡Bebe leche de sus pájaros! (Tiresias).

[Respeto a la Psicóloga si está firme en 5 (cinco) puntos o ejes. Hay que hacer algo más que dejar que el enfermo asocie libremente...]

En este punto conviene detenerse a pensar en la elección del analista; si es el sexo o no, determinante en la "elección del analista" o la "erección del alanizado". 

¿Balan o ladran?

(La Plata)

Babel

Cerraron puertas y ventanas los temerosos de Dios. Nyambe, pequeño dios del sol para los hombres de la tribu A-Louyi, ascendió hilando su tela de araña, según tengo entendido por un matricida brasileño, y desde las alturas dijo: “Adórenme”. Los miembros de la tribu respondieron: “Matemos a Nyambe”. La castración simbólica es el mensaje de la leyenda sumeria que fue apropiada por la comunidad hebrea de la que fui expulsado cuando debatieron sobre la transmisión del Talmúd contemplando la Torah. El sistema patriarcal no es secundario para Himen, la paciente de Inti, un ginecólogo rúnico. Aún me faltaba dilucidar por qué el verbo babal (confundir) es tan significante para la exploración simbólica que hacemos en este humilde rastreo etimológico. Por otro lado: la paternidad es función del nombre del padre, significante primordial de la metáfora, amar al prójimo para los cristianos y odiar a quienes pongan en peligro la integridad de los suyos y su progenie, su clan, su estructura familiar, para los ateos que odian a Nyambé. Me sorprendieron lo cultos que son y Samuel Tesler, el filósofo villacrespense fue capaz de subordinar a una clínica entera solo para criticar a un personaje de Adán Buenos Ayres.